La Ley de Segunda Oportunidad es un procedimiento legal en España que se encuentra regulado por la Ley Concursal y la ley 25/2015 que permite a aquellos particulares y autónomos que no pueden cumplir con sus obligaciones económicas, que puedan cancelar o reestructurar sus deudas y así poder comenzar de nuevo desde el punto de vista económico. Su principal objetivo es dar salida al sobreendeudamiento, de forma que esas personas físicas y autónomas puedan tener un nuevo comienzo, aunque para poder acceder a ella es necesario cumplir con una serie de requisitos fijados por la legislación vigente.
Como decimos, se trata de una ley pensada para personas físicas, tanto particulares como trabajadores por cuenta propia, que arrastran un nivel de deudas que dificulta su día a día. Está orientado a casos de sobreendeudamiento en los que la economía doméstica no es suficiente como para poder afrontarla, provocando que la deuda y los problemas financieros no dejen de aumentar.
La finalidad de la Ley de Segunda Oportunidad es cancelar deudas y aliviar el sobreendeudamiento, estando destinada a personas físicas (particulares y autónomos). Se requiere una situación de insolvencia y que se haya actuado de buena fe, siendo el juzgado competente el órgano que interviene para su concesión o denegación.
Para que el juzgado valore la cancelación de la deuda, se deben cumplir con estos 6 requisitos:
- Ser una persona física, ya sea particular o autónoma.
- Poder declarar la situación de insolvencia, es decir, que no sea posible atender los pagos debidos.
- Disponer de un mínimo de dos acreedores, sin ser suficiente con uno.
- El solicitante no puede tener antecedentes penales por delitos socioeconómicos con penas superiores a tres años.
- Debe demostrarse que se ha actuado como deudor de buena fe, tratando de buscar soluciones, intentar ingresos adicionales y ser transparente a lo largo de todo el proceso.
- Quién desee acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad debe colaborar con el juzgado, aportando la documentación que sea solicitada dentro de los plazos establecidos.
Cómo acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad
En el caso de cumplir con los requisitos exigidos, lo más recomendable es que en primer lugar se acuda a un abogado especializado en la Ley de Segunda Oportunidad, de manera que se pueda recibir el asesoramiento apropiado desde el primer momento y evitar así posibles errores a la hora de afrontar este proceso que puede suponer un gran alivio económico para los más afectados por las deudas.
Una vez presentada la solicitud, el juzgado revisará de manera minuciosa cada caso, analizando cada uno de los datos para poder comprobar si encaja dentro del marco de esta ley. Por lo tanto, será clave que se mantenga una actitud proactiva y ordenada, respondiendo a los requerimientos, presentando la documentación en tiempo y forma y que quede clara la buena fe exigida por la normativa.
En cuanto a las fechas, no se establece ninguna convocatoria en concreto, sino el cumplimiento de los requisitos y la evaluación judicial de cada caso, de manera que el hecho de que exista constancia y colaboración será decisivo en cada una de las fases de este proceso.
Más allá de poder solventar una situación de bloqueo económico o sobreendeudamiento, la Ley de la Segunda Oportunidad, considerada por muchos como una de las leyes más importantes de España, lleva asociados una serie de beneficios adicionales, como la posibilidad de volver a pedir financiación, desaparecer de los listados de morosidad y volver a tener tarjetas de crédito, entre otros.



