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Ojo con estas deudas, puede que el banco no te apruebe la hipoteca

Los bancos, al analizar una solicitud de hipoteca, valoran las garantías del cliente para pagar la cuota hipotecaria a largo plazo. Por consiguiente, cualquier deuda pendiente —ya sea con empresas, arrendadores, la administración pública o una comunidad de vecinos— constituye una señal de alerta. Así, es importante demostrar al banco que el historial está limpio, así como solventar cualquier deuda antes de solicitar la hipoteca.

El banco no concede la hipoteca si tienes estas deudas

Las entidades bancarias suelen consultar el perfil de los clientes que solicitan préstamos y para ello recurren a registros de morosidad como CIRBE y ASNEF, que recopilan información sobre impagos. De este modo, estas bases de datos sirven para valorar la solvencia de los solicitantes, tal y como explican desde Habitaclia.

En estos registros constan las deudas, que van desde impagos de préstamos personales hasta impagos de suministros como agua o electricidad. En el caso de CIRBE, figuran deudas superiores a 1.000 euros relacionadas con entidades financieras. Recuerda que más de 10 bancos rebajan el coste de las hipotecas.

Por su parte, ASNEF también registra deudas más pequeñas, como facturas de suministros no pagadas. De hecho, la empresa puede registrar hasta un impago superior a 50 euros cuando notifica con antelación al cliente sobre la existencia de la deuda. En cualquier caso, constar en listas de morosos pone en riesgo la aprobación de la hipoteca, por pequeña que sea la deudaAsí puedes salir de ASNEF o de otros ficheros de morosos.

Otra deuda que puede llevar al banco a desestimar la solicitud de una hipoteca es el impago a la administración pública, por ejemplo, a Hacienda o a la Seguridad Social. Si bien estas deudas no siempre aparecen en los registros mencionados, el banco puede pedir certificados de estar al corriente de pago y en cuanto a sus obligaciones fiscales.

Además, si el cliente no facilita estos documentos o los entrega y demuestran que tiene deudas con entidades públicas, puede generar desconfianza y lo más seguro es que el banco no conceda la hipoteca. Eso sí, si tienes esta cantidad de deuda, Hacienda te la perdona.

El impago de cuotas a la comunidad de propietarios también puede influir en la decisión del banco. Según la Ley de Propiedad Horizontal, estas deudas son fuente de problemas legales y de conflictos entre vecinos. Si te rechazan la hipoteca, esto es lo que puedes hacer.

Asimismo, las entidades bancarias pueden interpretar esta información como un indicio de irresponsabilidad económica por parte del solicitante de la hipoteca. Incluso, una única cuota no pagada puede ser suficiente para levantar sospechas y dar a pensar que hay probabilidades de que el cliente no pueda pagar la cuota hipotecaria en algún momento.

Las deudas por multas de tráfico o sanciones administrativas son menos habituales en un estudio de solvencia por parte del banco, pero también tienen un impacto negativo si lo consulta. En el caso de que no se pague dentro del plazo establecido, las sanciones aparecen en los registros de morosidad. Por pequeña que sea la cuantía, los bancos prefieren evitar cualquier señal de riesgo.

Otra situación que puede afectar a la solicitud de una hipoteca es el impago del alquiler. Pocas veces queda reflejado el impago de la renta, pero puede constar en algún registro oficial. Además, puede desembocar en demandas legales que los bancos sí pueden consultar. Como sucede con otras deudas, el banco puede considerar como un antecedente negativo un solo mes de impago del alquiler.